domingo, 26 de abril de 2009

Detrás del banquillo

Si la jornada pasada nos mostrábamos contrariados por la poca fortuna de nuestros delanteros cara a puerta, hoy la contrariedad se tendría que referir a la total ausencia de oportunidades. Ausencia que en esta ocasión se debió al buen planteamiento que del partido realizó el equipo ilicitano. El ex jugador de la Unión, Claudio Barragán, ahora entrenador del Elche, supo leer el partido excelentemente desde el principio con un férreo marcaje de nuestros hombres claves. Con un equipo aguerrido, fuerte en la presión y disciplinado nos ha dejado muy pocas oportunidades de llegar arriba. Añadiendo a todo ello que se encontraron con un gol tempranero que les favoreció en su estrategia, podremos encontrar las claves de un partido bronco, trabado y poco atractivo para el espectador.

Que el fútbol sea impredecible es seguramente la causa por la cual tenga tantos seguidores en todo el mundo. Cuando ya todos dábamos el partido por perdido: se estaban jugando los minutos de descuento, apareció la genialidad del viejo rockero. El delantero, Azcorra, le cede el balón de cabeza a Quique Martín, que viendo al cancerbero forastero un tanto adelantado, le lanza un balón bombeado que se le cuela allí donde salen las telarañas, haciendo inútil su retroceso por evitarlo.

En fin, un empate a uno que nos aleja un poco más de las esperanza de ascender. Si antes estaba difícil, con este resultado el asunto se complica un poco más si cabe. ¡Hala Unión!

2 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

¡No hay que perder nunca la esperanza!

pancho dijo...

Pedro: Así es, pero las posibilidades se van reduciendo.