domingo, 22 de noviembre de 2009

J. Sabina cervantino


Un lujo y un honor para Salamanca que el Flaco de Úbeda empezara la gira para presentar su nuevo trabajo “Vinagre y rosas” en nuestra ciudad. Los primeros conciertos son los más auténticos, carecen de vicios. La espontaneidad de su propuesta conquistó a una audiencia que no necesitaba de conquista porque se mostró entregada, a favor de obra, desde el principio, incluso dedicó a Salamanca dos poemas recitados de cosecha propia, “porque el amor cuando no muere mata, porque amores que matan nunca mueren”.


Sólo cinco minutos después de la hora prevista y durante más de dos horas, fue desgranando las canciones nuevas de su último álbum. Él vino a presentar su nuevo disco. A los sones de Lili Marlen apareció el hombre del baci – bombín a tomar posesión de una ciudad sabinesca durante los días veinte y veintiuno de Noviembre, haciendo que pasaran desapercibidas las efemérides obituarias del día. Se podían escuchar perfectamente pues eran escasos los que ya se las sabían, al haber aparecido el CD sólo unos días antes. Junto a ellas, cantó sus temas clásicos: Princesa, Calle melancolía, El pirata cojo… que eran coreadas por miles de voces pertenecientes a varias generaciones, predominantemente femeninas, como si fueran himnos generacionales, ¿Qué les dará el canalla éste de la voz rasgada?

A sus sesenta tacos se mostró mejor que nunca, en plena forma, sobrado en la ejecución de sus temas. Tan sobrio como el escenario que le dio cobijo durante los dos días. La nube negra que le atrapó, definitivamente desecha en agua de vida para él y los gozosos espectadores que pudimos disfrutar de sus creaciones en un concierto que será difícil de olvidar.


Se nos antoja cervantina su propuesta: pocas veces habrá tanta unanimidad a la hora de repartir talento como en el caso que nos ocupa y en el manco de Lepanto. La similitud de un Joaquín con un bombín que se hace yelmo a fuerza de repetición incondicional en sus seguidores, igual que a Don Quijote la bacia de barbero se le hace yelmo de Mambrino.

El espíritu de D. Alonso Quijano sobrevuela la escena en la delgadez del Hidalgo de Úbeda así como en sus fieles escuderos S/Pancho Panza /Varona. Generoso como ellos sólos saben ser, dejan que sus escuderos se luzcan. Ayer lo hizo de forma espléndida en el clásico receso de sus conciertos con uno de sus temas emblemáticos, mientras el maestro trataba de aliviar su garganta no acostumbrada aún a más de cuatro horas de entrega en los dos días helmánticos.


En definitiva, concierto que nos dejó satisfechos por su autenticidad y difícil de olvidar. Hay Joaquín para rato, visto lo bien que le caen sus sesenta.



9 comentarios:

Merche Pallarés dijo...

Joaquín Sabina es un genio. ¡Qué preciosas son casi todas, por no decir, todas sus canciones. Qué suerte tuviste de ir a su concierto. A ver si tambien viene a Ibiza o quizá, como iré a Madrid el 15 de diciembre, le veo allí. Nunca le he visto en concierto. Besotes sabineros/quijotescos, M.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Cantar canta poco...siempre lo hizo...pero que pedazo de poeta..y además paisano mio....

He podido verlo en concierto en varias ocasiones...saludos

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Qué grande es Sabina. Y qué sabio: comenzar por allí.

pancho dijo...

Merche: No fue fácil lo de las entradas. Cuando me enteré que vendían entradas para su concierto ya se habían agotado; menos mal que después decidieron dar otro concierto.

Tucci: No tiene la voz de Plácido Domingo, pero ahora la tiene mejor que cuando vino con Serrat, por ejemplo. Se nota que ya se cuida mejor que antes.

Pedro: El más grande de los españoles, sin duda.

Un abrazo a los tres y agradecido por vuestra visita y comentario.

Anónimo dijo...

Buenas noches, pancho:

- Estoy segura que disfrutarías, de Joaquín Sabina y de sus amigos.
- En el nuevo CD, hay algunas canciones que las escucharemos durante años, una y otra vez, cuando se viaja.
..."Si me invitan a una farra
cuenta con mi corazón.
Sí"...
Saludos. Gelu

pancho dijo...

Gelu: Todavía no tengo el CD, a ver si lo compro un día de estos.
Mis hijos han crecido escuchando las cintas de Sabina en el coche cuando viajábamos. Se las saben mejor que yo, tadavía las hay en el coche viejo. Hay que escucharlas muchas veces para aprenderse las letras, por eso es tan bueno.

De casa fuimos los cuatro. Cuando los invitas se apuntan a lo que haga falta.
Saludos

Unknown dijo...

Lo que hubiera dado por poder estar ahí.
Sabina tiene previsto actuar en un festival que hay cerca de donde resido los primeros días de febrero. Espero poder saludarlo.
Un abrazo

pancho dijo...

Jan: Aprovecha y no te lo pierdas. Salúdalo y dale recuerdos, creo que es mucho más amable que toda la parafernalia que lleva alrededor.
Un abrazo

mojadopapel dijo...

Tienes razón, está ahora mejor que hace unos años,se debe cuidar para que nos dure. Un saludo